Crecientes informes sobre delfines interactuando con miembros de su grupo familiar muertos han generado interrogantes sobre el entendimiento que los cetáceos tienen sobre la muerte. De acuerdo a una reciente publicación en la revista New Scientist, los delfines nariz de botella del oeste de Grecia, han sido observados reaccionando de distintas formas a la muerte de sus compañeros, dependiendo si ésta se produce de manera repentina o es el resultado de la larga agonía. Interpretar la conducta animal tras la muerte de un miembro de un grupo de cetáceos puede resultar una tarea difícil. Esto debido a que los episodios de muerte natural no suelen ser registrados formalmente y resulta fácil atribuir emociones humanas a los animales observados.
Sin embargo, diversas especies catalogadas como inteligentes, complejas y sociales – como chimpancés, gorilas y elefantes – presentan conductas particulares cuando un miembro de su grupo muere que han sido interpretadas como formas de duelo. La información existente y el creciente número de informes sobre cetáceos interactuando con animales muertos, sumado al hallazgo en 2006 de neuronas relacionadas a la empatía y la intuición en el cerebro de los cetáceos, sugieren que los delfines podrían tener una compleja y sofisticada reacción a la muerte.
La científica neozelandesa, Ingrid Visser, de la Fundación de Investigación Orca de Tutukaka, ha observado delfines nariz de botella y orcas llevando crías muertas, que ella también interpreta como conductas de duelo. Aunque reconoce que esta interpretación no se puede confirmar actualmente, recuerda que “sabemos que los cetáceos tienen neuronas de von Economo que están asociadas a los sentimientos de duelo y dolor en humanos”.
Las neuronas de von Economo son estructuras alargadas que, en cada punta, rematan en una Terminal nerviosa única, son cuatro veces más grandes que las normales y mucho más escasas en el cerebro. Se encuentran en humanos, grandes simios, elefantes y en 2006, se descubrió que también están presentes en especies de cetáceos como la ballena jorobada, la orca y los delfines nariz de botella.
La muerte de un ser de nuestro entorno, con quien hemos formado vínculos afecta nuestras emociones como seres, por qué para un delfín que perdió a uno de sus compañeros de cientos de leguas sería diferente…