En un partido casi perfecto en ambos lados del ovoide los Dolphins brindan una de sus actuaciones más completa en el momento indicado y logran un triunfo valioso para mover la aleta en su intento de remontada en el 2024.
A continuación las conclusiones que me dejó el triunfo en Inglewood, California.
Defensa por nota
Tal y como sucedió hace tres años en un partido en horario estelar la defensa de los Dolphins puso en su espalda el peso del equipo para guiarlos a la senda del triunfo cuando más lo requería. Los Rams regresaban a casa luego de vencer en overtime a los Seahawks la semana pasada. Mientras que Miami por segunda semana consecutiva perdió un juego en la última serie del partido.
La primera mitad parecía un copia y pega de las últimas dos semanas al irse arriba en el marcador y mostrando buena defensiva.
Sin embargo, parece que el equipo aprendió a mantener el nivel de juego los cuatro periodos y evitar el comeback del rival. La presión sobre Stafford fue durante todo el juego logrando 4 sacks, 5 pases desviados, 6 golpes al quarterback y varios rush haciendo incómodo el pocket de Matthew.
El regreso de Holland fue un impulso necesario para que la defensa secudnaria comandada por Jalen Ramsey pudiera contener al dúo de receptores de los Rams dejándolos con menos de 200 yardas combinadas a los dos receptores y con pocas jugadas explosivas. Pero la pieza que más extrañaba la defensa fue Zach Sieler. El tackle defensivo es FUNDAMENTAL para presionar por el centro de la línea ofensiva y detener el juego terrestre. El corredor de los Rams, llevaba ocho anotaciones durante la temporada y hoy su impacto fue reducido por el gran trabajo defensivo. Mención aparte al veterano Calais Campbell y el Toro Robinson quienes fueron unos demonios y estuvieron presionando toda la noche a Matthew Stafford…La defensa empieza a elevar su nivel de juego previo al cierre de año maravilloso trabajo de Weaver.
Calais Campbell still getting things done in year 17. pic.twitter.com/2kAvjwQJsV
— NFL (@NFL) November 12, 2024
Reponerse de los errores.
El primer periodo fue un dominio de Miami quién impuso el ritmo de juego al anotar en la primera serie. En el segundo periodo llegaron los intercambios de ovoide de los dos equipos, a pesar de esos momentos de incertidumbre el equipo mantuvo la calma y se fueron al descanso 10-06.
La segunda mitad el equipo mantuvo el juego terrestre como base de juego para evitar la presión del front 7 de Rams que habían provocado grandes estragos al pocket de Tua y seguir con el control del juego. Mientras que la defensa pudo contener a los Rams y obligar a conseguir sus puntos en base a puro field goals. Con pequeños pasos se ven los progresos y hoy el equipo dió uno en la dirección correcta.
El siguiente paso para Miami es generar una inercia ganadora y el próximo domingo Las Vegas Raiders visitan el Hard Rock Stadium.