Dolphins | Anthony Weaver inicia una completa reconstrucción defensiva.

Desde 2019 los Miami Dolphins han mostrado una identidad defensiva en la que sus jugadores se han desempeñado por encima de lo esperado, forzando a los coordinadores defensivos a improvisar y desarrollar conceptos lejanos a los enfoques tradiciones y aunque gozaron de cierto éxito, cuando se rompían, hubo resultados catastróficos. Ahora con la llegada de Anthony Weaver, se ha optado por enfrentar una verdadera reconstrucción defensiva, la cual más allá de una situación de negocios, luce como algo superlativo en términos deportivos.

Evolución de una defensa llena de héroes inesperados.

A la llegada de Brian Flores durante 2019, los Dolphins ejecutarían una limpia en la plantilla para sanear las finanzas y empezar una reconstrucción a través del reclutamiento. Así, se despojaron de los talentos de Ryan Tannehill, Laremy Tunsil, Minkah Fitzpatrick y Kenyan Drake entre otros, derivando en que al inicio de la temporada hubiera derrotas escandalosas y se desatase un escándalo por perder intencionalmente partidos. Sin embargo, el coordinador defensivo Patrick Graham junto al entrenador en jefe Brian Flores adecuaron la defensa basándose en un sistema atípico donde los defensivos secundarios podían aparecer en cualquier parte de la defensa, procurando complicar las lecturas. Este fundamento hizo que para final de esa temporada, Miami acumularía más triunfos de lo pronosticado, cerrando la temporada con varias victorias que incluso parecían complicar las oportunidades de reclutar al mariscal del futuro, Tua Tagovailoa.

Tras más de cien años de futbol americano, en la NFL de nuestros días resulta prácticamente imposible implementar un sistema defensivo u ofensivo que no incluya copias o adaptaciones de algún esquema del pasado. De hecho pese a ser atípico, el enfoque defensivo de Patrick Graham y Brian Flores no era nuevo, llevando un paso adelante los principios de la defensa aplicada por New England Patriots unas temporadas antes. En Miami, dado que la defensa aplicada servía para aligerar la carga de una ofensiva basada en elementos jóvenes, paso de un recurso a convertirse en prioridad, desatando un énfasis en integrar esquineros y profundos de suma flexibilidad que se ajustasen a cuanto rol fuera demandado y donde las actuaciones heroicas donde un chispazo defensivo resolvía un encuentro cerrado en favor de los Dolphins se volvieron cosa habitual.

La complicada defensa y el tóxico liderazgo de Flores trajo un cambio clave en el equipo, orillando a la salida de Patrick Graham y la promoción de Josh Boyer, quien pasó de ser entrenador de la defensiva secundaria a coordinador defensivo. Ciertamente, tanto Graham como Boyer en su primer año pese a recibir el nombramiento de coordinadores, más bien tuvieron un rol menor donde Brian Flores se encargaba de llamar la mayoría de las jugadas defensivas. Sin embargo, la forma en la que fue evolucionando la defensa de Miami con Josh Boyer, tuvo momentos de brillo que la convirtieron en referencia para la liga y mantuvieron competitivo al equipo. La improvisada solución de establecer un importante conjunto de esquineros y profundos, trajo consigo un disfrazado deterioro en los cuerpos de apoyadores, que se llenaron de elementos que difícilmente tendrían cabida en otros equipos y que justificaban su puesto con aportes en equipos especiales.

Josh Boyer cumplió con el principio de confundir al mariscal rival, aplicando formaciones mixtas entre 4-3 y 3-4, armando paquetes que incorporaban las fórmulas que Bill Belichick aplicó con Bill Parcells en los 80’s, incluyendo jugar técnica 2, técnica 4i, técnica 4, técnica 4i con un apoyador externo como una especie de técnica 5 o 6 en el mismo lado, un par de apoyadores entre las alas defensivas, etc.

Clarificando esta jerga, los defensivos deben colocarse en la línea de golpeo, buscando enfrentar a un liniero ofensivo atacándole directamente de frente o buscando alguno de sus costados, por lo que, dependiendo si se ataca al centro, un guardia, un tackle o una ala cerrada, existen múltiples técnicas de alineación defensivas, las cuales se ilustran a continuación.

Esta oportunista defensa requirió roles bastante distintos a las asignaciones defensivas en el resto de la liga, las cuales, pese a usar denominaciones comunes en otros sistemas, aplicaba roles notoriamente distintos y en más de un caso, únicos.

Esta defensa requería de alas defensivas denominados Rush End, asignatura que requiere aparentar técnicas 5/6/7/9, pero ajustar súbitamente y aplicar técnica 4, típicamente cuando otro caza-mariscales está en el campo. Este rol básicamente consiste en un defensivo libre por el lado débil de la formación, donde no habría ala cerrada que apoyase. Tanto Emmanuel Ogbah como Jaelan Phillips se destacaron, con un buen volumen de juego en este rol

Contrario a los masivos e inamovibles tackles defensivos de otras defensa, en Miami con Graham y Boyer se usaron elementos fuertes pero más ágiles usualmente tackle nariz de técnica 0, pero que en el último instante podría ajustar a una técnica 1 o técnica 2, buscando aplicar presión por el centro de la línea. Idealmente este rol emularía el trabajo que Malcolm Brown y Danny Shelton  realizaron con los Patriots del 2018. Lamentablemente Raekwon Davis fue irregular en esto y John Jenkins sufrió demasiadas lesiones.

Otras asignaciones requerían una rotación de tackles defensivos que apoyasen al tackle nariz mayormente en técnica 3 que podría ajustarse en técnicas 0, 1, 2i, 2, 4i, 4 y 5. Adam Butler vino de New England para acoplarse en este rol y servir de ejemplo para Christian Wilkins y Zach Sieler, con más éxito del esperado.

Además de las alas defensivas externos, se usaba un Big End, mayormente jugando desde técnica 5 o 6, pero que podía ajustar a técnica 5 abierta, técnica 7 o 9 de acuerdo a la lectura hecha por un profundo. La falta de profundidad hizo complicado darle seguimiento a este rol y demasiados jugadores fueron probados para esta asignación.

La complejidad del sistema era más obvia en los roles de los apoyadores, donde un apoyador externo cumplía funciones similares a las de un ala defensiva mayormente jugando técnica 5, tanto cerrada como abierta y aparentar técnica 7 o 9. Este apoyador tenía la imposible misión de cubrir el callejón entre el ala defensivo y el costado, pese a que probaron muchos jugadores, ninguno pudo limitar adecuadamente las rutas de escape de algunos mariscales móviles y los pases pantalla resultaron letales.

En la parte interna, la creatividad requería de apoyadores primarios conocidos como Will, rol que implicaba una multitud de asignaciones, desde cerrar el hueco principal, buscar derribos para pérdida de yardas hasta ajustar de un frente 4-3 a un frente 3-3 que incluyese cobertura de pases en zona o personal. Jerome Baker y sus reemplazos tuvieron más días malos que buenos en este puesto. Otro rol de los apoyadores internos era el típico apoyador central o Mike, que cerraba el hueco B que mayormente detendría la carrera. Elementos como Elandon Roberts apoyaron bajo tal asignatura la cual era también cubierta por elementos más grandes en paquetes específicos cerca de línea de gol o muy corto yardaje. La falta de velocidad y la falta de técnica hizo cuestionar el desempeño de estas posiciones. Los apoyadores externos usados como Sam fue una de las asignaturas más complicadas, usados en la tercera parte de las jugadas resbaladas en paquetes 4-2-5, 4-3 extendidos, 3-4 y 3-3-5. Kyle Van Noy fue el modelo de la posición, pero muchos apoyadores medios y alas defensivas trataron de ajustarse a esta función.

Las asignaturas de la defensiva secundaria eran tan complejas que los esquineros de ambos costados debían jugar coberturas hombre a hombre en la mayoría de jugadas, bajo coberturas Cover 3, Cover 5, Cover 6 y Cover 6 Buzz. Por diseño, este rol requería de estrellas top de la liga como Xavien Howard o Byron Jones, quienes tuvieron días buenos y malos, mientras las lesiones los respetaron, pero sus reemplazos sufrieron miserablemente en la mayoría de partidos, regalando jugadas grandes.

Las actuales reglas de la liga apoyan el juego aéreo y por ello el creciente número de jugadas donde la defensa aplica paquetes Nickel, con esquineros de ranura o slot y profundos en la misma zona, aplicando asignaturas hombre a hombre o coberturas por zona que requerían precisión y coordinación. Nik Needham y Jason McCourty destacaron emulando el rol de Patrick Chung con Patriots y formaron un antecedente para contrarrestar esquemas ofensivos con receptores veloces, pero quedaron expuestos contra alas cerradas y receptores de talla. La flexibilidad de estas posiciones llevó a contar con múltiples elementos en el roster y donde Miami llegó a poner más de un esquinero de ranura en el campo, disfrazando así situaciones de carga desde la ranura contra personal 12 o 21.

Otras asignaturas de los profundos incluían un rol similar al clásico profundo libre. Este rol cambio mucho conforme avanzaron las temporadas y pasó de un rol de cobertura de apoyo a Cover 1 con Jevon Holland. El complemento a este rol era el apoyador fuerte que solía cubrir al ala cerrada y donde Reshad Jones acabó siendo legendario. Lamentablemente Jones no resistió y los sustitutos tardaron en ajustar. Brandon Jones tuvo que desarrollarse en este rol, convirtiéndose en uno de los mejores disfrazando de forma efectiva sus disparos hacia el mariscal.

Tras la salida de Brian Flores, los Dolphins optaron por concentrarse en resolver la ofensiva y mantener los conceptos, dando continuidad a Josh Boyer como coordinador defensivo. Boyer hizo pocos ajustes relevantes, improvisando con jugadores de bajo perfil y buscando desarrollar algunos jugadores clave. Al desarrollar a los jugadores en este esquema, muchos partidos cerrados se resolvieron por una jugada defensiva que resolviese forzando un balón suelto, una intercepción o deteniendo de forma épica la serie final de los oponentes, pero arriesgaba suficiente para que Miami saliera con un resultado adverso en partidos relevantes, lo cual terminó por sellar el destino de Boyer, quien encontraría imposible dar argumentos para conservar su trabajo tras los resultados de la temporada 2022.

Llegada de Fangio un nuevo enfoque a la defensiva.

Los Miami Dolphins decidieron sacar la cartera y aprovechando la incertidumbre en Philadelphia, adquirieron a Vic Fangio, quien recibió un contrato por la mayor cifra otorgada a un coordinador defensivo. Vale decir que Vic Fangio suele diseñar sus defensas basado en un enfoque clásico que incluyen una menor cantidad de blitz y pretende presionar con tres tackles defensivos en la mayoría de situaciones.  Tras la compleja defensa de Boyer, volver a conceptos más tradicionales suponía no ser un problema. Sin embargo, la falta de jugadores que realmente diesen el molde y el desarrollo atípico que habían tenido en las últimas temporadas crearían una barrera de comunicación con el coordinador defensivo que termino por ser insalvable. Pese a gozar de la incorporación del estelar esquinero Jalen Ramsey, Fangio no pudo instalar de lleno sus conceptos defensivos y acabó por mantener parte de los sistemas previos. El principal problema fue cubrir las lesiones, insistiendo en usar varios jugadores en condiciones opuestas a la fortaleza de los individuos. Resultó inexcusable ver a Kader Kohou como esquinero principal cubriendo a estrellas como Stefon Diggs o a Xavien Howard siendo exigido al límite, exponiendo su pérdida de velocidad y reflejos. Las lesiones terminaron por ser caóticas, lo que explicaba varios partidos donde la defensa permitió muchos puntos, justificando una oportunidad para Fangio tras un año tan complicado, sin embargo las fallas de comunicación y el mal manejo de prioridades por parte de Vic Fangio acabaron con separarlo del puesto y hacer que vayan con un coordinador defensivo distinto por tercer año consecutivo.

Afortunadamente, el crecimiento en el lado ofensivo trajo un balance inesperado y pese a las derrotas y malas actuaciones tanto en Arrowhead Stadium en enero pasado como en Highmark Stadium un año antes, los Miami Dolphins de Mike McDaniel pueden jactarse de  haber llegado a postemporada en años consecutivos. Es claro que la ofensiva debe crecer, volver a ser efectivos en pases, pero especialmente ajustar el juego terrestre e incorporar más a las alas cerradas, en especial en zona roja.

Ahora, con la llegada de Anthony Weaver, Chris Grier y Mike McDaniel han optado por enfrentar una verdadera reconstrucción defensiva, la cual parecía partir de una situación de limitaciones salariales, pero ha resultado algo superlativo. Contrario a las improvisaciones de Graham, Boyer y Fangio, quienes ajustaron sus esquemas al personal disponible, la agencia libre está mostrando que Miami ha salido a comprar los ingredientes que ajusten al sistema defensivo.

Analizando las tendencias defensivas.

Para explicar el nuevo enfoque, analizaremos las tendencias defensivas mediante un modelo que refleje las tendencias en los llamados defensivos. Usando un análisis similar al planteado por Sam Hoppen y con base en información detallada jugada a jugada de la NFL más datos procesados por Sports Info Solutions, se pueden sintetizar las tendencias a través de gráficos que formen un área. En su modelo, Hoppen divide las asignaciones defensivas en siete clases:

  • Heavy Box – Que implica una acción defensiva para reforzar la línea de golpeo con personal para contrarrestar corridas obvias en situación de corto yardaje.
  • Light Box – Acciones defensivas donde se aplican defensas que ceden la zona corta, concentrados en evitar largo yardaje.
  • Nickel – Paquetes defensivos donde se despliegan defensivos secundarios especializados para defender situaciones con múltiples receptores.
  • Dime – Paquete especializado en defender situaciones obvias de pase que incorporen seis defensivos secundarios.
  • Blitz – Esquemas donde esquineros, profundos o apoyadores internos dejan su cobertura para presionar al pasador.
  • Zone – Asignaciones defensivas donde se aplica defensiva por zona.
  • Man – Asignaturas donde no hubo defensiva por zona, sino cobertura personal, hombre a hombre.

A través de manifestar el porcentaje de asignaturas defensivas para cada clase de asignación, es posible explorar las tendencias de cada genio responsable de los llamados defensivos de su equipo.

 

Analizando las tendencias recientes de los coordinadores defensivos de Miami,  es evidente que Josh Boyer, copió las tendencias de Patrick Graham, basándose en coberturas hombre a hombre y exaltando muy por encima del promedio las presiones con blitz, pero yendo en contra de conceptos obvios como basar la defensa en paquetes nickel que limiten la ganancia de yardas. Por su parte, Vic Fangio disminuyó sustancialmente la presión mediante blitz, aplicó mucho menos defensivas dime y se concentró en tomar como base una defensa nickel. El equipo tendía a no conceder el campo corto y tuvo la misma tendencia que en años previos para aplicar elementos pesados para defender corridas directas y situaciones de campo corto. La principal diferencia entre Fangio y sus predecesores es que favoreció la cobertura por zona sobre coberturas hombre a hombre.

Pero para entender cuan distinto fue lo que pudo implementar en Miami respecto del diseño que habría buscado, basta analizar que durante su estadía en Chicago, cuando Vic Fangio llamaba las jugadas defensivas como coordinador, su estilo era muy distinto de lo mostrado en Miami.

 

Su estilo de defensa refleja una mayor afinidad a las reglas modernas, favoreciendo sustancialmente un paquete nickel base, dejando de lado la defensa dime y mitigando las yardas tras la atrapada mayormente con coberturas por zona. El sello que no logró manifestar Vic Fangio con los Miami Dolphins fue su tendencia a defender las jugadas de poder con una caja más pesada. Y es que, por un lado las lesiones obligaron a improvisar y reusar lo que ya conocía el plantel y por otra parte, no era posible descartar ciertos jugadores y los terminó ocupando muy lejos de sus fortalezas.

A Vic Fangio le faltaron apoyadores de mayor velocidad y olfato por el balón, al tiempo que improvisó con los tackles defensivos disponibles, jugando lejos del modelo de preferencia del veterano coordinador. De hecho, no fue sino hasta que las lesiones diezmaron a los apoyadores y cazamariscales que Miami agrega personal muy cercano (y por encima de la edad adecuada) para implementar una defensa más afín a los principios de Fangio. Bastaría destacar que a Miami le faltaron piezas como un tackle nariz más físico y otro perfil de apoyadores y profundos.

 

Continuando con el análisis, si bien no hay forma de garantizar que tipo de defensa manifestará Anthony Weaver, parece razonable aceptar que retomará buena parte de los conceptos aplicados por Mike Macdonald con los Baltimore Ravens durante las más recientes temporadas. Esto implicaría abandonar los esquemas defensivos basados en coberturas personales, centrándose en paquetes nickel como base y aplicando un enfoque más agresivo del frente defensivo base que sea efectivo en presionar y defender el campo corto, sin recurrir regularmente a presiones a través de blitz.

En Baltimore, se ha favorecido los movimientos y ajustes tras del inicio de la jugada para confundir y evitar ajustes ofensivos, buscando fortalecer todas las áreas de la defensa, especialmente eficiencia en el tackleo y versatilidad de asignaturas para presionar o cobertura de pases. Esta defensa que tiene una metamorfosis al momento de centrar el balón, será el punto a desarrollar dentro de los Miami Dolphins este verano y conceptos defensivos avanzados como el Cover 6 de los Baltimore Ravens.

Cover 6 es escencialmente un Cover 4 de un lado del campo y Cover 2 del otro. Este esquema asimétrico ha sido el esquema base usado por Mike Macdonald, aplicado en la cuarta parte de las jugadas defensivas contra ofensivas derivadas del árbol de Kyle Shanahan que domina buena parte de la NFL, incluyendo a los Miami Dolphins de Mike McDaniel. El concepto es simple, complicar la ofensiva y hacerla sentir incómoda todo el tiempo.

Las recientes adquisiciones de Miami, renovando casi todas las líneas, hace sentido en lo táctico, más allá del saneamiento financiero que parecía mostrarse al dejar ir a elementos como Christian Wilkins, Brandon Jones, Xavien Howard o Jerome Baker.

Aún falta mucho camino antes de poder dilucidar quienes tomaran el rol de Patrick Queen, Roquan Smith, Kyle Hamilton, Justin Madubuike, Marlon Humphrey, Marcus Williams o demás piezas de los Baltimore Ravens, pero es un hecho que la defensa de los Miami Dolphins mostrará una identidad completamente diferente a partir de la temporada 2024.

This article has 2 Comments

  1. Hola, muy importante información. Para ir asimilando el trabajo de la defensiva, y ver como va evolucionando el trabajo, del nuevo coordinador defensivo. Gracias por la información. Y espero, que el equipo, siga callando bocas. Por lo pronto ; Saludos!!! Hasta pronto!!!.

    1. Trataremos de ir analizando las posiciones defensivas y la forma en la que se amoldan.
      Creo que la siguiente parada obvia vendrá previo al Draft y luego cuando sepamos la clase de novatos en Miami entre elementos reclutados y agentes libres no reclutados, así como canjes.
      Recordemos que los Dolphins han hecho canjes enormes días antes del Draft.
      FinsUp!!

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